Se considera que un niño o una niña necesitan una educación especial si tienen una dificultad especial en el aprendizaje que requiera una necesidad educativa especial.
El concepto de dificultad de aprendizaje es relativo; se da cuando un niño tiene una dificultad para aprender significativamente mayor que la mayoría de los niños de su misma edad, o si sufre una incapacidad que le impide o dificulta el uso de la instalaciones educativas que generalmente tiene a su disposición los compañeros de su misma edad.
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